lunes, 30 de enero de 2012

Sistema respiratorio
La respiración es el proceso por el cual ingresamos aire (que contiene oxígeno) a nuestro organismo y sacamos de él aire rico en dióxido de carbono. Un ser vivo puede estar varias horas sin comer, dormir o tomar agua, pero no puede dejar de respirar más de tres minutos. Esto grafica la importancia de la respiración para nuestra vida.

El sistema respiratorio de los seres humanos está formado por:
Las vías respiratorias: son las fosas nasales, la faringe, la laringe, la tráquea, los bronquios y los bronquíolos.  La boca también es, un órgano por donde entra y sale el aire durante la respiración.
Las fosas nasales son dos cavidades situadas encima de la boca.  Se abren al exterior por los orificios de la nariz (donde reside el sentido del olfato) y se comunican con la faringe por la parte posterior.  En el interior de las fosas nasales se encuentra la membrana pituitaria, que calienta y humedece el aire que inspiramos. De este modo, se evita que el aire reseque la garganta, o que llegue muy frío hasta los pulmones, lo que podría producir enfermedades. No confundir esta membrana pituitaria con la glándula pituitaria o hipófisis.
La faringe se encuentra a continuación de las fosas nasales y de la boca.  Forma parte también del sistema digestivo.  A través de ella pasan el alimento que ingerimos y el aire que respiramos.
La laringe está situada en el comienzo de la tráquea.  Es una cavidad formada por cartílagos que presenta una saliente llamada comúnmente nuez.  En la laringe se encuentran las cuerdas vocales que, al vibrar, producen la voz.
La tráquea es un conducto de unos doce centímetros de longitud.  Está situada delante del esófago.
Los bronquios son los dos tubos en que se divide la tráquea.  Penetran en los pulmones, donde se ramifican una multitud de veces, hasta llegar a formar los bronquiolos.
Los pulmones
Son dos órganos esponjosos de color rosado que están protegidos por las costillas. 
Mientras que el pulmón derecho tiene tres lóbulos, el pulmón izquierdo sólo tiene dos, con un hueco para acomodar el corazón. Los bronquios se subdividen dentro de los lóbulos en otros más pequeños y éstos a su vez en conductos aún más pequeños. Terminan en minúsculos saquitos de aire, o alvéolos, rodeados de capilares.

Una membrana llamada pleura rodea los pulmones y los protege del roce con las costillas.
Alvéolos
En los alvéolos se realiza el intercambio gaseoso: cuando los alvéolos se llenan con el aire inhalado, el oxígeno se difunde hacia la sangre de los capilares, que es bombeada por el corazón hasta los tejidos del cuerpo. El dióxido de carbono se difunde desde la sangre a los pulmones, desde donde es exhalado.


El transporte de oxígeno en la sangre es realizado por los glóbulos rojos, quienes son los encargados de llevarlo a cada célula, de nuestro organismo, que lo requiera.
Al no respirar no llegaría oxigeno a nuestras células y por lo tanto no podrían realizarse todos los procesos metabólicos que nuestro organismo requiere para subsistir, esto traería como consecuencia una muerte súbita por asfixia (si no llega oxígeno a los pulmones) o una muerte cerebral (si no llega oxígeno al cerebro.

Proceso de inspiración y exhalación del aire

Inspiración
Cuando el diafragma se contrae y se mueve hacia abajo, los músculos pectorales menores y los intercostales presionan las costillas hacia fuera. La cavidad torácica se expande y el aire entra con rapidez en los pulmones a través de la tráquea para llenar el vacío resultante.


Espiración

Cuando el diafragma se relaja, adopta su posición normal, curvado hacia arriba; entonces los pulmones se contraen y el aire se expele.


viernes, 27 de enero de 2012

Hipertensión

¿qué es?

Es la elevación de los niveles de presión arterial de forma continua o sostenida. Para entenderlo mejor es importante definir la presión arterial. El corazón ejerce presión sobre las arterias para que éstas conduzcan la sangre hacia los diferentes órganos del cuerpo humano. Esta acción es lo que se conoce como presión arterial. La presión máxima se obtiene en cada contracción del corazón y la mínima, con cada relajación.

Diagnóstico

El diagnóstico se basa en un sencillo procedimiento de medición, aunque en algunos casos son necesarias otras pruebas como el holter de presión arterial. Es imprescindible completar el estudio con un análisis de laboratorio (de sangre y orina) y un electrocardiograma. Para facilitar un diagnóstico es muy importante tener presente estas recomendaciones:
La hipertensión arterial no produce síntomas y puede pasar inadvertida.
Es más frecuente a partir de los 40 años, aunque puede aparecer a cualquier edad.
Hay predisposición familiar, aunque se da también en personas sin antecedentes.

¿Cómo se mide?

La presión arterial se mide mediante unos aparatos llamados esfingomanómetros, popularmente conocidos como tensiómetros, que deben someterse a las validaciones y homologaciones reglamentarias. Para que la medida obtenida sea correcta debes seguir una serie de indicaciones:
·          Como la presión arterial cambia a lo largo del día y de la noche, haz la medición siempre a la misma hora.
·          Busca una habitación tranquila, sin ruidos ni interrupciones, con una temperatura de 20-25º C.
·          Debes estar relajado. No beber, comer, fumar ni hacer ejercicio físico la media hora anterior.
·          Reposa 5 minutos antes de la toma.
·          Siéntate cómodamente con la espalda apoyada en el respaldo de la silla, no cruces las piernas y quítate la ropa que pueda oprimirte el brazo.
·          Si el tensiómetro es de brazo, coloca el manguito dos o tres centímetros por encima del codo. Deja la palma de la mano boca arriba y el codo lígeramente flexionado a la altura del corazón.
·          Si el tensiómetro es de muñeca, pon la muñequera a la altura del corazón.
·          No hables durante la medición.
·          Realiza dos mediciones separadas al menos dos minutos y quédate con el resultado de la media de ambas.
·          Apunta los valores obtenidos para informar a tu médico.

¿Cuáles son los niveles normales de presión arterial?

*       Presión arterial normal. Los niveles de máximos de presión arterial sistólica (máxima) están entre 120-129 mmHg, y las de diastólica (mínima) entre 80 y 84 mmHg. Cifras más bajas también pueden considerarse normales, siempre que no provoquen ningún síntoma.
*       Presión arterial normal-alta. Las cifras de presión arterial sistólica (máxima) están entre 130-139 mmHg, y las de diastólica (mínima) entre 80-89 mmHg. En personas diabéticas, con afectación del corazón (hipertrofia ventricular) o daño renal, los niveles superiores a 130/80 mmHg también se consideran altos.
¿Existe la presión arterial compensada?
Se puede hablar de presión arterial alta, normal o baja, pero nunca de compensada o descompensada. A nivel práctico, estas tres posibilidades resultan negativas:
·          Tener elevada la presión máxima (sistólica) o la mínima (diastólica).
·          Tener elevadas tanto la mínima como la máxima.
·          Tener una alta y la otra baja también es malo.
Tratamiento y prevencion
El mejor tratamiento de la hipertensión es una buena prevención que evite su aparición. Para ello es fundamental seguir un estilo de vida cardiosaludable:
·          No fumes. El tabaco aumenta la presión arterial y la frecuencia cardiaca. Además, las personas hipertensas fumadoras multiplican el efecto perjudicial del tabaco. Dejar de fumar tiene unos efectos positivos superiores a cualquier medicación para la hipertensión.
·          Cuidado con el alcohol. El consumo moderado de alcohol (un vaso de vino al día en las comidas) puede ser beneficioso, pero si es excesivo provoca el incremento de la presión arterial y otras alteraciones perjudiciales el corazón y otros órganos.
·          Controla tu peso. El sobrepeso es una causa de hipertensión. Rebajarlo reduce la presión arterial y disminuye el riesgo cardiovascular y de diabetes.
·          Ejercítate. La realización de ejercicio físico regular consigue bajar las cifras de presión arterial. Además, aumenta la masa muscular y la capacidad de esfuerzo, ayuda a controlar el peso y logra disminuir el riesgo cardiovascular.
·          Practica una dieta cardiosaludable. Los hipertensos deben disminuir el consumo de sal y alimentos que la contengan. También es necesario consumir frutas, verduras, legumbres, frutos secos, pan y otros cereales. Por último, usar aceite de oliva como grasa principal e incrementar la ingesta de aves y pescado en detrimento de las carnes rojas.
·          Tratamiento farmacológico. Si eres hipertenso no puedes conformarte con las recomendaciones anteriores, ya que es posible que debas seguir un tratamiento farmacológico. Los resultados no siempre reflejan una reducción inmediata de la presión arterial, así que es necesario esperar un poco antes de plantearle al médico un cambio de medicación. Los fármacos antihipertensivos están agrupados en varios tipos:
1.        Diuréticos.
2.        Inhibidores del sistema renina angiotensina (IECA).
3.        Antagonistas de los receptores de angiotensina (ARA-II)
4.        Calcioantagonistas.
5.        Betabloqueantes.
6.        Asociación de fármacos.
Los pacientes que siguen un tratamiento antihipertensivo deben tener en cuenta estos consejos:
·          Aunque la presión arterial se haya normalizado no hay que dejar de tomar la medicación nunca.
·          Cumplir estrictamente el tratamiento e intentar mantener siempre el horario de ingesta de las pastillas.
·          Consulta al doctor si el tratamiento no obtiene resultados, ya que a veces es necesario asociar varios fármacos para controlar la presión arterial. Revisa también la dieta por si algún alimento (por ejemplo, la sal) está impidiendo el efecto antihipertensivo de la medicación.
·          El tratamiento debe compatibilizarse siempre con el estilo de vida cardiosaludable.
·          Vigila el resto de los factores de riesgo, ya que si no, tus buenas cifras de presión arterial no servirán de mucho. 

lunes, 23 de enero de 2012

HIPOTENSION

¿Qué es?
La hipotensión es el nombre técnico de una baja presión arterial. Se produce cuando los latidos del corazón, encargados de bombear la sangre al resto del cuerpo, tienen un ritmo más pausado de lo habitual. Por este motivo ni el cerebro, ni el corazón ni el resto del organismo recibe la sangre necesaria, lo que puede dar lugar a mareos y desmayos.

Causas
Hay muchos factores causantes de la hipotensión. En primer lugar se puede producir porque los dispositivos que mantienen la presión arterial no funcionan de forma adecuada y transmite señales de forma incorrecta. Es habitual que se manifieste cuando un individuo está un largo periodo de tiempo de pie y afecta sobre todo a los jóvenes y niños. Cuando se produce una hemorragia aguda es muy probable que el enfermo padezca hipotensión.
Sin embargo, se podría enumerar una larga lista de causas por las que una persona puede padecer este trastorno. Habitualmente es causado por drogas como el alcohol, analgésicos, medicamentos usados para la cirugía, diuréticos, etc. O también porque el afectado sufre arritmias, deshidratación, anafilaxia o padece una diabetes avanzada.

Síntomas de Hipotensión

Generalmente los principales síntomas son los mareos o desvanecimientos. El rápido descenso de la presión arterial puede ocasionar la pérdida de conocimiento (síncopes). Aunque sus efectos también pueden ser más leves, como la somnolencia, desconcierto o debilidad.

Tratamientos
La hipotensión normalmente no necesita tratamientos, aunque en ocasiones sí que requiere de asistencia médica, dependiendo de los síntomas. Por ejemplo, si la hipotensión es la causa de un shock requiere urgentemente una atención médica que le suministrará sueros o sangre por vía intravenosa y le recetará medicamentos para que la presión arterial aumente. Si se trata de una hipotensión ortostática provocada por el suministro de fármacos, el médico los cambiará o modificará la cantidad prescrita.

viernes, 13 de enero de 2012

  CIRCULACION

 La circulación es la distribución, a todas las células del organismo, de las moléculas alimenticias y también del oxígeno, así como la recogida del dióxido de carbono, del agua y del amoníaco o sus derivados, que son los productos de desecho de la respiración celular. La fórmula del amoníaco es NH3. A veces no se expulsa al exterior amoníaco puro, sino algún derivado, como la urea o el ácido úrico.
      Un aparato circulatorio típico consta de corazón, algunos seres poseen varios de estos órganos, que impulsa un líquido denominado medio interno, y de una serie de conductos o vasos por los que circula el medio interno. Según el sentido en el que el medio interno se mueve, hay dos tipos de vasos: las arterias si va del corazón a los órganos y las venas si va de los órganos al corazón.

TIPOS DE APARATOS CIRCULATORIOS
 Hay dos tipos de aparatos circulatorios: el aparato circulatorio cerrado y el aparato circulatorio abierto.
·                   En el aparato circulatorio cerrado no sale nunca de los vasos. Tienen circulación por aparato circulatorio cerrado todos los vertebrados, los cefalópodos y los anélidos.
·                   En el aparato circulatorio abierto, los vasos comunican con unas amplias cavidades o lagunas, que son inundadas por el medio interno, la hemolinfa, en este caso.
·                   La circulación cerrada puede ser sencilla o doble.
·                   La circulación cerrada es sencilla cuando la sangre, al dar una vuelta completa, sólo pasa una vez por el corazón, como sucede en los peces.
·                   La circulación cerrada es doble cuando la sangre pasa dos veces por el corazón, una para ir a los pulmones y otra para ir al resto del cuerpo.
A su vez, la circulación doble puede ser incompleta o completa.
·                   La circulación doble es incompleta cuando la sangre oxigenada procedente de los pulmones se junta en el corazón con la sangre no oxigenada procedente de otras partes del cuerpo, dado que, en este tipo de circulación, los corazones sólo poseen un ventrículo. Esto ocurre en los anfibios y en los reptiles excepto los crocodilianos.
·                   La circulación es completa cuando no se juntan los dos tipos de sangre, ya que, en ese tipo de circulación, los corazones poseen dos ventrículos. Esto ocurre en los crocodilianos, en las aves y en los mamíferos.
Hay algunos invertebrados, como las esponjas y los celentéreos, que carecen de aparato circulatorio; en ellos el transporte se realiza deuna célula a otra

lunes, 9 de enero de 2012

EL CORAZON
El corazón es el órgano principal del aparato circulatorio. Es un órgano musculoso y cónico situado en la cavidad toracica. Funciona como una bomba, impulsando la sangre a todo el cuerpo. Su tamaño es un poco mayor que el puño de su portador . El corazón está dividido en cuatro cámaras o cavidades: dos superiores, llamadas aurícula derecha  (atrio derecho) y aurícula izquierda (atrio izquierdo), y dos inferiores, llamadas ventrículo derecho y ventrículo izquierdo. El corazón es un órgano muscular autocontrolado, una bomba aspirante e impelente, formado por dos bombas en paralelo que trabajan al unísono para propulsar la sangre hacia todos los órganos del cuerpo. Las aurículas son cámaras de recepción, que envían la sangre que reciben hacia los ventrículos, que funcionan como cámaras de expulsión. El corazón derecho recibe sangre poco oxigenada desde:
§                     la vena cava inferior (VCI), que transporta la sangre procedente del tórax, el abdomen y las extremidades inferiores
§                     la vena cava superior (VCS), que recibe la sangre de las extremidades superiores y la cabeza.
La vena cava inferior y la vena cava superior vierten la sangre poco oxigenada en la aurícula derecha. Esta la traspasa al ventrículo derecho a través de la válvula tripusquide, y desde aquí se impulsa hacia los pulmones a través de las arterias pulmonares, separadas del ventrículo derecho por la válvula pulmonar.
Una vez que se oxigena a su paso por los pulmones, la sangre vuelve al corazón izquierdo a través de las venas pulmonares, entrando en la aurícula izquierda. De aquí pasa al ventrículo izquierdo, separado de la aurícula izquierda por la válvula mitral. Desde el ventrículo izquierdo, la sangre es propulsada hacia la arteria aorta a través de la válvula aórtica , para proporcionar oxígeno a todos los tejidos del organismo. Una vez que los diferentes órganos han captado el oxígeno de la sangre arterial, la sangre pobre en oxígeno entra en el sistema venoso y retorna al corazón derecho.
El corazón impulsa la sangre mediante los movimientos de sístole (auricular y ventricular) y diastole.
Se denomina sístole a la contracción del corazón (ya sea de una aurícula o de un ventrículo) para expulsar la sangre hacia los tejidos.
Se denomina diástole a la relajación del corazón para recibir la sangre procedente de los tejidos.
Un ciclo cardíaco está formado por una fase de relajación y llenado ventricular (diástole) seguida de una fase contracción y vaciado ventricular (sístole). Cuando se utiliza un estetoscopio, se pueden distinguir dos ruidos:
§                     el primero corresponde a la contracción de los ventrículos con el consecuente cierre de las válvulas auriculoventriculares (mitral y tricuspidea);
§                     el segundo corresponde a la relajación de los ventrículos con el consecuente retorno de sangre hacia los ventrículos y cierre de la válvula pulmonar y aórtica.



ANATOMIA DEL CORAZON
El corazón es un órgano musculoso hueco cuya función es bombear la sangre a través de los vasos sanguíneos del organismo. Se sitúa en la parte inferior del mediastino medio en donde está rodeado por una membrana fibrosa gruesa llamada pericardio. Esta envuelto laxamente por el saco pericárdico que es un saco seroso de doble pared que encierra al corazón. El pericardio esta formado por un capa Parietal y una capa visceral. Rodeando a la capa de pericardio parietal está la fibrosa, formado por tejido conectivo y adiposo. La capa serosa del pericardio interior secreta líquido pericárdico que lubrica la superficie del corazón, para aislarlo y evitar la fricción mecánica que sufre durante la contracción. Las capas fibrosas externas lo protegen y separan.
El corazón se compone de tres tipos de músculo cardíaco principalmente:
§                     Músculo auricular.
§                     Músculo ventricular.
§                     Fibras musculares excitadoras y conductoras especializadas.
Estos se pueden agrupar en dos grupos, músculos de la contracción y músculos de la excitación. A los músculos de la contracción se les encuentran: músculo auricular y músculo ventricular; a los músculos de la excitación se encuentra: fibras musculares excitadoras y conductoras especializadas.
Estructura del corazón
De dentro a fuera el corazón presenta las siguientes capas:
§                     El endocardio, una membrana serosa de endotelio y tejido conectivo de revestimiento interno, con la cual entra en contacto la sangre. Incluye fibras elásticas y de colágeno, vasos sanguíneos y fibras musculares especializadas, las cuales se denominan Fibras de Purkinje. En su estructura encontramos las trabéculas carnosas, que dan resistencia para aumentar la contracción del corazón.
§                     El miocardio, es una masa muscular contráctil. El músculo cardíaco propiamente dicho; encargado de impulsar la sangre por el cuerpo mediante su contracción. Encontramos también en esta capa tejido conectivo, capilares sanguíneos, capilares linfáticos y fibras nerviosas.
§                     El pericardio es una membrana fibroserosa de dos capas, el pericardio visceral seroso  y el pericardio fibroso o parietal, que envuelve al corazón y a los grandes vasos separándolos de las estructuras vecinas. Forma una especie de bolsa o saco que cubre completamente al corazón y se prolonga hasta las raíces de los grandes vasos. En conjunto recubren a todo el corazón para que este no tenga alguna lesión.